domingo, 23 de septiembre de 2012

Manual de danzas Cristianas




ORIGEN DE LA DANZA EN LA IGLESIA

Tradición Hebrea

El Dios de los Hebreos es el Dios de los Cristianos: los grandes padres de la fe Cristiana son los padres de la fe Hebrea. La historia de salvación de Dios sobre nosotros se parte en dos en el momento en que Jesús nace y cumple extraordinariamente la misión colocada por el Padre.
En la Iglesia Bautista, reconocemos la importancia del pueblo de Israel como pueblo elegido, y su historia contenida dentro del denominado Antiguo Testamento, como parte de nuestra formación y como medio de entendimiento del misterio Mesiánico de Jesús.
Es por esto que las enseñanzas y mandatos establecidos dentro del A.T.
son tomados, siempre, desde la mirada de Jesús, experiencia descrita dentro del denominado Nuevo Testamento. Partiendo de lo anterior, en varios textos del Antiguo Testamento se nos hace notar la utilización de la Danza dentro de los diferentes rituales y fiestas judías. Llaman la atención aquellos que nos invitan a Danzar como forma de Oración y Ofrecimiento de la alabanza a Dios. 
Experiencia de David (2 Samuel 6, 1-23)
Si se lee este pasaje se pueden comprender varios aspectos:
David es uno de los más grandes ejemplos del Amor de Dios, de ser un humilde pastor pasa a ser uno de los más grandes reyes del pueblo israelí, su profundo amor a Dios lo hace un ser humano en permanente comunicación con Dios.
En el tiempo del reinado de David, la presencia de Dios tenía un lugar de específico encuentro con Él, que era donde estaba ubicada el Arca de la Alianza. Ésta era lo más sagrado entre lo sagrado, y allí frente a su presencia un hijo de Dios (como tu o como yo), Danzaba frente a Él.
David un hombre pecador, sensible, orgulloso y temeroso de estar lejos de Dios, en constante lucha personal, encontraba en la danza la forma de expresar agradecimiento y alabanzas al Rey de Reyes, a Dios nuestro Señor (2 Sam 6, 1-7); encontraba la forma de pedir su misericordia sin importar mayor comentario (2 Sam 6, 21-23).
Plasmaba así un mandato para todo creyente:"...Alaben a Dios en su Santuario, alábenlo en el firmamento de su gloria....Alábenlo con Danzas y tambores... alabe al Señor todo el que vive Aleluya" (Sal 150), para ser reconfirmado el mandato del Libro del Apocalipsis (5, 13)".... y oí que respondían: al que esta sentado en el trono y a Cristo, alabanza, honor, gloria y potencia por los siglos de los siglos"
Vivencia del Pueblo Judío
La danza, en el pueblo judío no podía faltar en ninguna celebración, ya sea de tipo religioso o festivo. La danza realizada a nivel religioso, consistía en un conjunto de pasos que se ejecutaban de forma repetitiva y en rondas, donde abrazados, danzaban cánticos con mensaje religioso.

 
Transición Judeo-Cristiana
Jesús, los discípulos y primeros seguidores, en su mayoría eran judíos, y practicaban las leyes hebreas con sus costumbres. Una vez Jesús realiza su labor evangelizadora, se inicia la formación del culto y ritual de la primera Iglesia Cristiana, donde comienza a fusionarse esta tradición hebrea con el nuevo mensaje de Cristo Jesús. De lo anterior podemos deducir que la danza pudo ser parte de los rituales de esta primera Iglesia, más aún teniendo en cuenta la importancia de David dentro de las escrituras, dentro de la vida de Jesús, (donde a Jesús se le nombra varias veces en el nuevo testamento como el "Hijo de David"). 
El ejemplo de David, la forma de orar, su contacto íntimo con Dios, sus mensajes y expresiones orantes como la danza, no podrían desaparecer dentro de las formas de alabar a la Santísima Trinidad.
Danza en la Iglesia Cristiana Bautista
En los principios fundamentales de la doctrina bautista se hace referencia a las diferentes expresiones artísticas para alabar a Dios, que deben ser impulsadas. Eso sí, cumpliendo respetuosamente los mandatos de la Santa palabra de Dios.
La información que se tiene de la danza, aún es incipiente y está en construcción, por todos aquellos a quienes Dios nos ha permitido conocerla. 

DANZAS CRISTIANAS 


Se podría afirmar que todos los vacíos existentes en el ser humano surgen en su mayoría de dos necesidades esenciales: 
Ser amados, y Amar
La danza, en primer lugar es un proceso sanador tanto de los integrantes, como de la comunidad. En la medida, en que se enseñe y se vivencie que "el amor de Dios es incondicional y todos los días Él nos lo regala", este proceso se hace realidad, puesto que la primera necesidad esencial ya estarácolmada (ser amados), y la segunda seráconsecuencia de la primera (amar).
Un segundo proceso que Dios regala, con la experiencia de la Danza es la expresión de sentimientos: Por la cultura en que estamos inmersos, cada día se nos obliga a no expresar nuestros sentimientos y reprimirlos, en función de agradar al mundo. La Danza le permite al ser humano romper tal esquema, y con cada paso, con cada coreografía, con cada movimiento, con cada oración se va rompiendo la rigidez interna de cada persona, lo que le permite expresar y sentir en forma más adecuada y sana.
Tercero, el proceso espiritual no es un proceso solamente individual sino comunitario, la revelación de Dios se hace a través de una comunidad, siendo nuestra comunidad mayor La Iglesia Bautista y la esencial nuestra familia. Es por esto que los Danzantes a Dios, tendrán necesariamente el objetivo de conformarse como un Ministerio, es decir como una comunidad orante y con una misión evangelizadora.
Cuarto: El trabajo realizado por el ministerio de danza tendrá que reflejarse ante la comunidad, cumpliendo una misión básica, la de ser intercesores de las necesidades de las personas pertenecientes a la iglesia. Intercesora, al ser una oración que clamorosamente expresa la creencia en el Amor y en el Poder de Dios, permite la actuación de Dios en forma más fuerte y efectiva. 

Danzas en niños


La Danza De Niños En Las Iglesias, Debe Ser?



La danza de niños en la iglesia es un tema un poco controversial. Ya que algunos  ministerios  los aceptan mientras que otros no. La mayoría de las iglesias que los aceptan, separan los grupos en niños, jóvenes y adultos. La mayoría de los integrantes  de los ministerios de danza son adultos, mayormente adultos jóvenes, y se permite especial participación de algunos niños cuando cumplen 12 años. En cuanto a la razón de no aceptarlos, algunos líderes de ministerios sienten que estos no son espiritualmente maduros para conducirse en un ministerio. Refieren que a menos que los niños sean como Samuel, consagrados desde edad  temprana  para las cosas del Señor, no deberían pertenecer de forma permanente  a un grupo de danza, u otros ministerios.
Sin embargo, los niños en sentido general, portan una unción especial para la danza;  y los que pertenecen a ministerios como este, deben tener padres o adultos que tomen la responsabilidad de interceder por ellos, porque pueden ser seriamente atacados por el enemigo. En el libro de Gálatas, vemos una palabra que nos orienta claramente a esto  (aunque claro esta, no hace referencia directa a la danza) en el capitulo 4:1-2. “En otras palabras, mientras el heredero es menor de edad, en nada se diferencia de un esclavo, a pesar de ser dueño de todo. Al contrario, está bajo el cuidado de tutores y administradores…”
Los  cantores, músicos y danzores,  van en las primeras filas del ejercito y son atacados primero  (Salmos 68:25).
Viéndolo de esta forma, permitiríamos a nuestros niños pequeños ir al frente de una pelea en la que nos encontramos envueltos, sin haberlos adiestrado antes a como pelear y defenderse?  No estaríamos a la espalda de ellos protegiéndolos de cualquier ataque nosotros mismos? Pues, esta misma debe ser la actitud cuando nuestros niños están en ministerios en nuestras iglesias.
Muy a menudo se ven niños en ministerios de danza y canto, los cuales vienen de hogares disfuncionales donde existe el maltrato a nivel físico y espiritual. Muchas veces se ven yendo solos a las iglesias o con algún familiar que los lleva, hasta por el mero hecho de descansar de ellos un par de horas. En su mayoría,  estos niños crecen y se hacen jóvenes con heridas internas muy profundas y llegan a ser ministros con un sin numero de problemas, que por ser diestros por la experiencia que les da el tiempo en el ministerio, escalan lugares altos en las sociedades cristianas, haciéndose mucho daño ellos mismos y a las personas que están a su alrededor aun teniendo grandes llamados.
No obstante a esto, no nos cabe duda de lo importante que es,  cuando una persona  es instruida desde niño de la forma establecida por la palabra en los ministerios que Dios tenga para ellos. Por lo tanto, no deben ser desechados sino mas bien debidamente llevados de la mano. No deben estar en un ministerio solo por ocupar su tiempo ni por que se vean bien haciendo esto o aquello, sino por un llamado o una instrucción del Señor.
El líder, debe mantenerse en constante oración para ver cuando el Señor quiere que estos participen y cuales de ellos. Siempre habrá algunas excepciones, y siempre habrá presión de algunos padres y tutores, que sin entender muchas de las cosas que planteamos antes, insisten en que sus niños sean aceptados en ministerios. En mi experiencia personal, tuve que enfrentar duras criticas y murmuraciones por esta causa, cuando en una ocasión dirigiendo un ministerio de alabanza, un padre insistía en que su hija ingresara al ministerio, cuando la misma no manifestaba interés en sentarse por un tiempo determinado solo a recibir las clases de enseñanza de la palabra con el grupo, alegando el padre que solo la estaban haciendo perder el tiempo.
Es  muy importante para el líder, director o pastor de ministerios entender, que alguien que solo quiere hacer cosas en publico para el Señor, debe tener un tiempo de orientación y enseñanza para ayudarle a enfocarse en lo correcto.
Los niños no deben ser excluidos (Mateo 19:14) si de tales es el reino, como dice la Palabra. Debe buscarse la dirección de Dios para saber cuales han sido llamados al ministerio, formarlos y llevarlos de la mano hasta que alcancen madurez espiritual suficiente para orar e interceder efectivamente ellos mismos.
Que piensas usted de esto? Nos gustaría ver su opinión en los comentarios.